martes, 22 de junio de 2010


.+*Tres Lecciones*+.
Punto de vista de Zoe ((Capitulo Uno))


Había estado mas de dos horas por reloj mirando el techo, como quería que fuese sábado!
Me puse muy contenta al saber de la reunión programada por Yolei. Resulta que este sábado se inauguran un nuevo club en el centro de Shibuya y todos vamos a ir!
Koji, Koichi, Yolei, Sora, yo y… Takuya! Si muy bien. Estoy enamorada de el desde la aventura en el digimundo, pero… quien no podría enamorarse de el es tan tierno, valiente, fuerte… muy bien, me fui de tema.
El punto es que el ira y yo tal vez tenga la oportunidad de decirle lo que siento por el, después de lo sucedido en mi cumpleaños descubrí muchas cosas.

Entonces escuche un grito proveniente de abajo:

- Zoe, ya apaga las luces, es tarde! –
- Si mamá – Conteste

Me digne a dormir, cerré los ojos y espere que fuese de día …

Sueño de Zoe:
Flash Back

En la mansión Orimoto se estaba realizando una fiesta, los catorce años de nuestra querida Zoe.
En un rincón varios adolescentes jugaban un juego no muy inocente, “Siete Minutos en el Paraíso”
El juego constaba de una botella, el que giraba la botella debía entrar por siete minutos en el armario con la persona a la que le toco la parte de la tapa.
Todos estaban muy entretenidos, hasta que a Takuya le toco girar y la botella callo en Zoe.
Ambos entraron muy nerviosos en el pequeño y oscuro armario. Dentro ambos estaban muy rojos, tanto como un tomate, pero gracias a la oscuridad eso no se notaba. El lugar era tan pequeño que se chocaron varias veces, y en uno de los choques…
Takuya rozo sus labios con los de Zoe, primero fue solo contacto pero luego el beso se profundizo, ambos lo deseaban. Fue un beso lento, casi mágico, hasta que reaccionaron.
Ambos se separaron y se abrió la puerta, salieron rojos y cabizbajos. No se volvieron a hablar en toda la noche y…

Fin Sueño – Flash Back

Abrí mis ojos lentamente, “Que lindo sueño” pensé. Y me reprimí por hacerlo.
Recordé que después de aquello no volví a verlo, agradecí mentalmente a Yolei por su idea del nuevo club. Por fin lo vería y todo se aclararía.

Los días pasaban lentamente, no había momento que no pensara en MI Takuya. No podía llamarlo, no sabría que decirle, y yo prefería hablarle personalmente.
…Martes…Miércoles…Jueves…V
iernes… Sábado! Por fin el día había llegado!

Me prepare velozmente quería ser la primera en llegar, pero al salir de mi cuarto algo me detuvo…

- Buen día hija – Saludo mi mama, algo tramaba
- Buen día, má, ya me voy, Matt me lleva – Le dije tratando de pasar
- Zoe, espera, no te lo llevas a Tk con vos, esta aburrido y hace tanto calor – Sabia que algo tramaba
- Pero mamá! – Proteste
- Vamos, serás recompensada, se va a portar bien, lo conoces! – Mi madre y sus dichos, iba a salir ganando
- Yo si pero vos no – Susurre para que no me oyera…
- Dijiste algo amor?? – Pero aparentemente escucho
- No nada, decile que lo espero abajo, en el infierno – Lo ultimo lo dije bajando las escaleras y por suerte no me oyó.

Mi hermano, Yamato, nos llevo hasta el club, nos dio dinero y se fue rápidamente.
Tk todavía no había dicho palabra, hasta que pagamos la entrada y comenzó con sus preguntas interminables…

- ¿Quiénes vienen? ¿El chico que te gusta? ¿Takuya?
- ¿Cómo sabes eso?
- Lo leí en tu diario

Lo quería mucho, pero no. Comencé a correrlo por todo el club gritando:

- Como se te ocurre! Eso es privado, yo no leo tus revistas playboy!

Luego supuse que eso no fue muy femenino, pero fue tan relajante que lo repetiría.
Corrimos alrededor de 15 minutos, hasta que me canse, eso no era muy difícil para mi. Aun contenía el deseo de matarlo, pero llegaron mis amigos y tuve que ignorarlo.

Nos reunimos todos bajo un árbol, mi hermano encontró a algunos de sus amigos y se fue prometiendo volver mas tarde.
El lugar era realmente hermoso, mire a Takuya de reojo, al parecer el también me miraba a mi, no nos habíamos dirigido la palabra… aun.
Hablamos de lo que habíamos hecho en estas vacaciones, contamos chistes y anécdotas del digimundo.
Luego de una hora allí abajo nos pusimos de acuerdo para cambiarnos en los baños.

Yo fui la primera en salir, llevaba un traje de baño rojo con detalles en rosa, un moño rosa en el cabello y unas ojotas a juego, hacia mucho que no me ponía esa bikini, me la había regalado Takuya en uno de mis cumpleaños, me quedaba grande, pero no la quise cambiar, era muy bonita, y ahora me quedaba realmente bien.
Como no vi a nadie fuera me senté en el primer banco que vi. Estuve allí un rato largo, pensando en que le podría decir a Takuya. Hasta que vi a lo lejos la silueta de Koichi…

- Hola! Linda bikini! – Me dijo el hermano más cariñoso del mundo. Últimamente éramos grandes amigos, por no decir vecinos, el si que me sabia escuchar.
- Ah, si gracias – Le conteste algo distante, aun pensaba en Takuya
- Hey! Que sucede?? Te veo rara desde hace tiempo. Hay algo que no sepa?? Conociéndote, luego de ese comentario me habrías golpeado o insinuado algo.
- Je, creo que te golpeare después. Estoy algo distraída desde mi cumple
- Te escucho
- Bueno…

Le conté todo lo sucedido, lo que me pasaba y lo que sentía, mientras recordaba que esos chicos estaban tardando mucho.

- Wow, me tendría que haber dado cuenta cuando salieron tan despeinados de ese armario! Te cuido cierto?!?
- Koichi! No fue para tanto, no hicimos nada malo! Sos un malpensado!
- A quien me hace acordar?? – Dijo insinuando que era a mi
- Mira allá viene tu Romeo, y los demás retrasados! – Dijo, esto ultimo gritando para que se enterasen
- Lo siento, a Yolei le se atoro la ojota en el lavabo y tuvimos que ayudar a sacarla – Dijo Sora
- No voy a preguntar – Dijimos Koichi y yo a la vez, algo asustados por el relato.

Después, el resto de la mañana transcurrió tranquila. Jugábamos con el agua, hablábamos, tomábamos sol, simplemente nos divertíamos. Pero a mi me preocupaba que no había cruzado palabra con Takuya, sentía que me ignoraba olímpicamente.
Me levante de mi lugar junto a Sora y camine hacia Takuya, pero en el camino me tope con Koji.

- Hola Zoe! No queres jugar un juego??
- Mmm, bueno de que se trata?? Le dije inocente.
- De esto!!! – Dijeron Koji y Koichi a la vez.

No entendía lo que sucedía, de un momento al otro los hermanos me levantaron y me arrojaron a la pileta de agua helada. Así comenzó una guerra de agua a muerte entre chicos y chicas.
Terminamos todos muy cansados, y al mirar hacia mi derecha me encontré a un Takuya saliendo cabizbajo de la pileta.
Salí rápido y fui tras el, lo seguí hasta unos árboles, allí lo tome del brazo, lo di vuelta y le dije:

- ¿A dónde vas? ¿Qué sucede Takuya? – Hace tanto que no decía su nombre, lo escuchaba solo en mi mente. Lo saboreé al decirlo y lo mire a los ojos. Estos trasmitían tantas cosas que yo quería devolver.
- Tengo que pensar, Izumi – El hizo lo mismo, me llamo por mi nombre, como odiaba que me llamaran así, pero viniendo de el me encantaba.
- ¿En que? – No quería que se fuera
- En… - Dijo dudando lo que seguiría
- ¿En lo que sucedió en mi cumpleaños? – Soy muy impaciente, no debí haberlo apurado
- Si es que creo…
- Crees… - Internamente me quería matar, no podía seguir empujandolo a una pileta que no sabia si estaba llena o vacía.
- Te quiero

Auch! La pileta estaba llena, y yo caí sola con la ropa puesta.
Me quede estática, no esperaba eso por parte de el, ni siquiera sabia que esperaba.
No podía hablar de la impresión, mis labios no se movían. Lo mire a los ojos y vi que esperaba una respuesta.
Yo quería corresponderlo, decirle que también lo quería, que lo amaba, pero el tiempo se me fue volando. Su cara cambio de una de impaciencia a una de decepción. Me imagine que interpreto mi silencio como un rechazo, pero no era así!

De repente salio Tk de los arbustos, por una vez le agradecí mentalmente. Hizo que Takuya se quedara un rato más.
Pero mi agradecimiento no duro mucho porque…

- Zoe, hay un problema, ese chico de allá, míralo, no me gusta como te mira. Dijo algo de conseguir un beso. ¿Vos sabes de que se trata? ¿Sos virgen?

Por favor! Este momento no podía ser peor! El chico de mis sueño se me declaraba y saltaba mi hermano a hablar de mi virginidad!
De un momento a otro me di cuenta de que estaba mirando al suelo, Tk seguía hablando incoherencias y Takuya caminada, aparentemente decepcionado, hacia el lado opuesto a donde me encontraba.
Una lagrima rodó por mi mejilla, solo a mi me suceden estas cosas.
Mire a mi hermano que seguía hablando tonterías. Le di una mirada fulminante y se cayó.

- Te doy 10 minutos para que corras – Le dije enfadada e impaciente
- Pero odias correr, acordate hoy en la mañana – Me dijo algo atemorizado
- Pero quiero matarte, cual deseo puede mas??

Así repetimos la rutina de la mañana, lo perseguí por todos lados, sacaba rabia de no se donde, y tenia que desquitarme.
Llegamos hasta la entrada de las canchas de tenis, el lugar estaba cerrado, el gusano no tenía escapatoria.
Cualquiera que nos hubiese visto se reiria, el niño tenia una cara de susto, era un año menor que yo, pero parecía mucho mayor por su cuerpo. Me dieron ganas de reírme de la escena, pero reprimí esas ganas y di un paso adelante. Esto hizo que el diera un paso hacia atrás y terminara entre las bolsas de basura.
Yo había conseguido mi venganza.
Me reí un rato largo hasta que volvimos con los demás. Me extraño no ver a Takuya. Esperaba que su desaparición no tuviese que ver con lo sucedido entre nosotros.
Le pregunte a Koichi.

- No se a donde fue, dijo que tenia cosas que hacer y simplemente se fue, no estaba muy animado. ¿Paso algo?
- Bueno, si, después te lo explico

El resto del día también paso bien, todos se divertían, pero yo estaba algo ida, preocupada por Takuya. Me sentía culpable.

Lo primero que hice al llegar a mi casa fue llamarlo, necesitaba pedirle disculpas, necesitaba verlo.
Su madre me contesto y dijo que aun no había llegado, le pedí que le dejara un recado. Me dejo muy preocupada.
El nunca llamo.

Seguí presionando. Estaba mal, preocupada y sobre todo demasiado enamorada como para dar el caso por perdido.
Lo llame, le mande mails, mensajes. Pero nada. Parecía que se hubiese borrado de la faz de la tierra.

Había pasado un mes desde la última vez que lo vi, me resigne a esperar a verlo en clases, no faltaba mucho, estábamos en principios de Febrero.
Eran las tres de la tarde y hacia calor. Pensaba en Takuya, en todo lo vivido a su lado.
Tome mi celular de la mesa y salí rumbo al parque. Ese que quedaba a unas cuadras de la casa de Tommy. Me puse a recordar. Ese pequeño niño llorón me enseño muchas cosas.
Una vez me dijo: “Conserva la esperanza”
Y lo haré, la mantendré viva, por Tommy, por Takuya.

Me senté en un banco a recordar, seguía confundida, enserio podría mantener viva mi esperanza?? Necesitaba que me ayudasen.
De repente algo, o mas bien alguien se me abalanzo sobre mi, al principio creí que era Takuya, solo ensoñaciones mías.
Era…

- Zoe!!! – Me dijo mi loca amiga
- Mimi! Hace tanto que no te veía! – Mimi, Mimi Tachikawa, mi vieja amiga de Italia, siempre me ayudo, creo que me serviría mucho hablar con ella.
- Si! No creí verte. Volví hoy con mi padre de Italia, mi madre se quedo con mi hermana.
- Me leíste la mente, ya te iba a preguntar por Kary, jeje, vinieron por la empresa??
- Si, a expandirla, solo estaremos un mes
- Eso me pone muy contenta, lastima que te quedes tan poco
- Cuéntame Zoe, que sucede??
- Tu si eres bruja
- Takuya??
- Todavía te acuerdas de el??
- Solo hablaste de el las vacaciones pasadas
- Muy bien, que observadora, te contare…

Le conté todo con lujo de detalle, ella era la persona indicada, mi mejor amiga, simplemente mejor que mi diario.

- Bueno, yo creo que debes conservar tu esperanza.
- Sabes un amigo me dijo lo mismo
- Bueno, debes esperar a verlo, y que el pánico no te gane. Si realmente lo quieres las palabras saldrán solas y podrás confesarle todo lo que sientes hacia el.
- Gracias Meems, eres una gran amiga!

Nos despedimos con un abrazo y yo seguí pensando, di un par de vueltas por el parque.

“Conserva tu esperanza”

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